Hasta que llegué a México pensaba que el litro era una unidad del Sistema Internacional de medida (S.I) equivalente a un decímetro cúbico. Aquí, los litros –en especial los de combustible que despachan en las gasolineras– son una unidad variable de volumen (digamos que entre 850 y 999 mililitros). Para evitar confusiones, en los raros casos en que los litros alcanzan el volumen estipulado por el S.I. se conocen como “litros de a litro” y existen aplicaciones que ayudan al consumidor a encontrarlos.